El mirón

Publicado el 12 de septiembre de 2025, 16:01

Siempre he sentido que hay algo intensamente excitante en la mirada furtiva. En ese instante en que sabes —o intuyes— que alguien te observa desde la sombra, que sus ojos recorren cada curva de tu cuerpo sin que tú hayas dado permiso.

 

Es una mezcla de vulnerabilidad y poder. Vulnerabilidad porque quedas expuesta, convertida en espectáculo involuntario. Poder porque, aun sin moverte, decides si prolongas el juego o lo rompes de golpe.

 

Recuerdo las primeras veces que sentí florecer mi vena exhibicionista. Siempre digo que, de todas mis perversiones, esta es la más acentuada. Como sabéis, cuando relato mis primeras experiencias, lo hago desde mi mayoría de edad; jamás reflejo nada anterior. Así que, en las dos anécdotas que voy a contar, yo ya tenía los dieciocho años.

 

En aquel tiempo sentía un placer perverso al ver cómo mi profesor de Biología me miraba con esa ansia de macho en celo, como si estuviera a punto de perder el control solo con observarme. En mi colegio era obligatorio el uso del uniforme y solo íbamos chicas —algo común en la época, en centros privados de corte religioso—. Para situaros, os diré que el uniforme consistía en un polo blanco con el escudo del colegio, zapatos marrones y una falda plisada con estampado tartán en tonos verde oscuro con líneas rojas. Como os podéis imaginar, la falda debía cubrirnos por debajo de la rodilla. Pero yo, durante las clases de Biología, poco a poco, comenzaba a subírmela… dejando al descubierto un poco más de carne.

 

Mi «profe» babeaba; recuerdo cómo balbuceaba sin apartar los ojos de mí, perdido entre mis muslos, intentando mantener la compostura mientras repetía que «las células constituyen los pilares fundamentales de la vida…» Era morboso ver cómo se desmoronaba, cómo luchaba por contenerse sin lograrlo. Yo lo disfrutaba con una excitación desbordante. Más aún al notar la erección hinchándose bajo sus pantalones de pitillo, dura, imposible de disimular. No negaré que aquello me empapaba las bragas, haciéndome sentir más viva y sucia que nunca. Aprovechando el recreo o el rato entre clase y clase, para ir al servicio a aliviarme. Joder… recuerdo que me ponía tan cachonda que no tardaba en correrme ni dos minutos, teniéndome que morder los labios para no gritar.

 

Por esa misma época también descubrí el juego de exhibirme ante Joel, un hombre de origen filipino que trabajaba en casa encargado de la jardinería y de cualquier chapuza. Papá era un hombre con ideas demasiado conservadoras, y nunca nos permitió tomar el sol en topless en la piscina. Pero un día, aprovechando que no había nadie —él estaba en el trabajo y mamá, seguramente de compras—, decidí desafiar esa norma.

 

Estaba tumbada en una hamaca con un bikini blanco junto a la piscina, mientras Joel podaba los setos al otro lado de la valla. Sabía perfectamente que me estaba mirando. No solo eso: se tocaba mientras lo hacía, pegado al seto. No lo dudé; me quité la parte de arriba, fingiendo que lo hacía para broncearme mejor.

 

Ese día crucé un umbral del que ya nunca pude regresar: el vértigo delicioso de exhibirme, la excitación provocadora de sentirme observada, devorada en silencio, convertida en objeto de deseo sin pronunciar una sola palabra. Desde entonces, esa pulsión late en mí como una llama sucia y permanente, inseparable de mi vida.

 

Y vosotros… ¿Qué preferís: ser unos mirones o la vulnerabilidad obscena de ser observados? Confesadlo abajo en los comentarios.

 

 

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Comentarios

Jon
hace 8 días

Yo disfruto viéndolo todo… cuanto más prohibido, más me pone. Tu falda subida me habría vuelto loco

Bukanero
hace 8 días

Soy de los que prefieren mirar… en silencio, con la polla dura en la mano. Y que tú lo sepas

Ana
hace 8 días

Tengo 20 años y soy exhibicionista hasta la médula. Necesito que me miren, que me devoren con los ojos, que se corran al verme... Pero me suele pasar solo con conocidos, sobre todos con los padres de mis amigas, sentir que les excito me pone muy caliente, aunque nunca he llegado a nada

Dbl
hace 5 días

Buenos días, a todos nos gusta exhibirnos un poco, en más de una ocasión pude comprobar como me miraba la hermana de mi mujer, miraba y le gustaba ser mirada, cuantas veces me masturbo como ahora pensando en ella🤫🤫🤫🔥🔥

David
hace 8 días

Soy muy miron, es algo que no puedo evitar

TOR
hace 8 días

Lo tuyo me parece brutal. Yo me muero por mirar, por espiar sin ser descubierto. Esa mezcla de peligro y excitación me vuelve loco. Y mientras leía tu relato, juro que podía verme a mí mismo escondido tras esos setos, con la mano agitándose desesperada, devorando cada movimiento de tu cuerpo

Manote
hace 8 días

Leyéndote me acordé de cuando iba a la universidad. Vivía en un piso compartido y mi compañero tenía una novia que siempre se duchaba con la puerta entreabierta. Yo me quedaba en el pasillo fingiendo que buscaba algo… y en realidad la miraba enjabonarse. Aquello me ponía tan duro que tenía que correrme en silencio en mi cuarto después. Fue mi primera experiencia real como voyeur

toño
hace 8 días

Yo soy más exhibicionista que mirón. La primera vez que lo probé fue en un viaje en tren, en un vagón casi vacío. Me metí la mano por dentro del pantalón y empecé a tocarme despacio, sabiendo que una mujer al fondo me estaba mirando. No apartó la vista en todo el trayecto. Esa mirada me dio el orgasmo más intenso de mi vida

Paco
hace 8 días

De chaval trabajaba en un almacén y teníamos cámaras de seguridad. Una noche me quedé solo y aproveché para follar con una compañera en la oficina, justo delante de una cámara. Sabíamos que el jefe lo vería al día siguiente, y eso nos calentó aún más. Desde entonces descubrí que me excita ser observado

Tauro
hace 8 días

A mí me pone mirar. Una vez, en una fiesta, me escondí en la escalera y observé a una pareja follando en una habitación medio abierta. Lo que más me excitó no fue verlos, sino pensar que podían descubrirme en cualquier momento. Ese miedo me hizo correrme en silencio, con la mano en el bolsillo

Bea
hace 8 días

Tengo 52 años, estoy casada y tengo dos hijos que ya viven fuera de casa, soy muy morbosa, lo malo que mi esposo es muy celoso. Soy de las que prefieren ser observadas. Este verano, aprovechando que mi esposo se quedó en el hotel a dormir la siesta, me animé a quitarme la parte de arriba del bikini. Había un grupo de chicos jóvenes casi al lado y me di cuenta de que no apartaban la vista. En vez de taparme, me me estiré y abrí un poco las piernas para que lo vieran todo. Sentí un morbo brutal

Martita
hace 8 días

Yo siempre he sido muy puta para que me miren. Una noche, con 20 años, volví de fiesta colocada y me dio por salir en bata sin nada debajo, me abrí la bata en la terraza. El vecino de abajo estaba fumando. En vez de taparme, me senté en la barandilla con las piernas abiertas y fingí que hablaba por teléfono mientras me acariciaba. Verle quedarse paralizado, sin dejar de mirar, me hizo correrme allí mismo

Elena
hace 8 días

A mi me pasa con los maridos de mis amigas y también con mi cuñado. Saber que los vuelvo locos cuando me pongo una buena minifalda me pone supercachonda

Virginia
hace 8 días

Nunca he contado esto, pero me pone mucho hacerlo en tu block. Hasta ahora era mi mayor secreto. Tengo 24 años y llevo con mi novio desde hace 5, lo que más me calienta es notar cómo mi suegro me mira. Al principio fingía que no me daba cuenta, pero ahora me excita jugar con eso. Cuando voy a su casa me pongo vestidos ligeros, sin sujetador, y me inclino a propósito para que se me marquen los pezones. Siento su mirada clavada, es un salido de cojones. me mojo solo de imaginar lo que estará pensando. A veces, mientras hablamos en la mesa, se que no aparta los ojos de mis piernas y yo disfruto separándolas un poco más, haciéndole desear lo que nunca debería tener. me pone cachonda hasta escribirlo

Pol
hace 8 días

Me encanta ver ami hermana vestirse desde la puerta, ella lo sabe y deja la puerta entreabierta. Es maravillosa. Es mi mejor paja del día

Marcos
hace 8 días

Hola interesante post todos tenemos esa dualidad una mas marcada que otra.Hoy será mi último aporte adiós a todos y hasta la próxima vida

Fran
hace 7 días

La dualidad existe, pero yo más mirón y comencé viendo a mi hermana en el baño duchándose , pero menuda bronca. En fin tiempos pasados

Ruben
hace 7 días

Tengo veinte años y vivo con mi madre, ella tiene 43. Vivimos en una casa de campo a la salida del pueblo, mis padres se divorciaron hace años. Una vez regrese de improviso de una salida con amigos de fin de semana y escuché un ruido en el pasillo que me puso en alerta. Me acerqué a la puerta de su habitacion y era mi madre, se la estaban follando. No veais como gritaba. Al principio senti mucha rabia y estuve a punto de irme de casa, pero me quede pegado a la puerta. Grabe el sonido con el movil, no se la raon. Es una casa baja y su habitación da al jardin, sali de casa, necesitaba verla. Tenía la persiana bajada pero habia una rendija por la que podía ver un poco. La tenian a cuatro y sentí algo que no se contar. Estaba con dos hombres, se la chupaba a uno y el otro le daba por detrás. Por mas que lo intenté, no pude verles las caras. Un buen rato despues, cuando se corrieron, salieron de casa, ella los acompaño desnuda a la puerta y se dio un morreo, primero con uno y luego con el otro. Seguí a los tios hasta el coche que tenian aparcado apartado. A uno lo conocí, es el marido de una de sus amigos y padre de un amigo mio, al otro no fui capaz de identificarlo, pues era de noche y tenia que ir apartado. Me la pelé como un mono y desde entonces no hago mas que escribir o ver lo que grabe con el movil. Quiero volver a verla, desde entonces soy un miron

OlGa
hace 7 días

Me llamo Olga y soy de Alicante. Tengo 23 años y mi hermano 27, él es un chico bastante solitario que no tiene casi amigos y apenas sale de fiesta, solo le gusta su trabajo, intenet y el cine, puede verse varias pelis al día, o pasar en youtube horas y horas. Yo soy todo lo contrario. Una noche que venia yo de fiesta bastante flipada, me mareaba en la cama y decidí darme una ducha para que se me pasara el mareo. Como era tan tarde no cerré la puerta, y de pronto sentí una sombra. Miré con disimulo y vi a mi hermano en la puerta, se estaba haciendo un pajote... Me quedé muerta... pero dejé que siguiera... Fue algo tremendo para mí. Llegué a la cama mas caliente que una plancha y me tuve que tocar. Desde entonces lo hacemos muy a menudo cuando mis padres no están. Nunca hablamos, jamas me toca... yo me muestro desnuda para él, y dejo que se la casque... Os juro q es como una droga a la q me he vuelto adicta. tengo novio y lo quiero un montón y nunca le he sido infiel, y me da miedo que este sentimiento de exhibirme pueda crecer y destozar mi relación con él. Me gustaría que me dieras algún consejo. Muchas gracias Deva, acabo de comprar tu nueva novela, estoy deseando comenzarla

Monri
hace 7 días

Tengo un amigo que se folla a su mujer delante de mi y de otro amigo desde hace tiempo. Todo surguió el día de la comunión de uno de sus hijos, por la noche. Ella está superbuena y aunque ha tenido tres hijos, sigue teniendo un cuerpazo de la ostia. Lo más morboso, es que aunque nosotros solo podemos mirar, no podemos tocarla y menos follarla, solo masturbarnos mirando. Ella no deja de mirarnos durante todo el rato y nos hace preguntas tipo ¿Estoy buena? ¿Os gustan mis tetas? Sobre todo le gusta que le digamos cosas subidas de tono, tipo: que puta eres Sole. No veas como grita. Por lo tanto si, soy un miron de la ostia

Rosa
hace 7 días

Me encanta hacer top les en la playa o en la piscina e imaginrme que algún hombre esta empalmado por mi culpa. También me gusta salir a la terraza y dar un buen espectaculo. Al lado tengo un piso en el que viven chicos estudiantes, si no está mi esposo los caliento tanto, que llegaban a decirme cositas subidas. Es mi mejor momento de la semana

Marcial
hace 7 días

A mi no me gusta mucho que me vean, pero a mi mujer le encanta. A veces me pide que me la lleve a follar fuera, si no lo hago pude cerrar las piernas durante días, y no me como un colin jejejej Solemos ir de noche a un descampado donde van mirones. Ella abre las ventanillas para que la oigan y se acerque, a mi me cort un poco y tengo que concentrarme, pero ella se vuelve loca. Ya sabeis que para gustos los colores

Perro
hace 7 días

me gusta ver como mean las tias

Vito
hace 7 días

Mi caso es diferente, me gusta la exibicion, pero no la mia, si no la de mi mujer. Me encanta mostrar fotos suyas desnuda o en momentos intimos. Creo que vivo para eso

Susan
hace 7 días

Me pone una barbaridad que me miren. Si llevo un escote es para que se les claven los ojos en las tetas, y si me pongo falda corta es porque disfruto viendo cómo se mueren por mirar entre las piernas. Una vez en el bus, un tío no podía apartar la vista de mi muslo, y yo abrí un poco más las piernas solo para verle ponerse rojo. Ese juego me calienta más que cualquier cumplido.

Lina
hace 7 días

Me pone exhibirme, provocar, hacerme la guarra delante de todos y saber que se quedan calientes, empalmados, con ganas de follarme aunque no se atrevan a decir nada. Ese es mi juego.

Pere
hace 7 días

Tengo una sobrina que está como queso. A la muy zorra le gusta ponerme dura. Suele llevar unas minifaldas cortisimas, y tiene una patas rquisimas, lo siento por mi hermano pero me la follaría sin pensarlo. El caso es que este verano fuimos a una casa rural toda la familia, teniais que haberlavisto provocandome una noche, yo sentado con su madre y ella a mi izquierda, abriendo las patas mirandome a los ojos con una cara de viciosa.La muy puta me la puso dura. Pero ese dia en la cocina, un momento que estabamos solos, intente tocarle el culo y me pego un totazo que me dejo tiritando. La zorra solo quiere calentar

Sergi
hace 7 días

Miron, soy un puto miron empedernido que a veces me cuesta disimular, pues temo que las amigas de mi hija se den cuenta de cuanto me calienta, de que las amigas e incluso la hermana de mi esposa se de cuenta de lo salido que soy. Pero es algo que no puedo remediar, y que solo yo, y a hora tú sabe.Besos Deva Nandiny, te amo

Rober
hace 7 días

De adolescente solía quedarme a dormir en casa de un amigo. Una noche, al ir al baño, pasé junto a la habitación de su hermana mayor. La puerta estaba medio abierta y ella estaba desnuda, frente al espejo, acariciándose las tetas, aún recuerdo su coño con un bello negro rizado. Me puse como una moto. Han pasado más de veinte años desde aquello, ahora es una mujer de cuarenta y pico años a la que veo muy a menudo, pues trabajo cerca de su casa. Cada vez que me cruzo con ella se me viene a la imagen ese parte de tetaza y ese coño lleno de lo rozado. Aun sigo poniendome brutote con esa imagen

Merce
hace 7 días

El año pasado fui a ver una película y al cine con mi marido. Sentada a su lado, metí la mano bajo mi falda y empecé a tocarme lentamente. Él no se dio cuenta, pero un par de butacas a mi izquierda había un hombre que no apartaba la vista. Cuando crucé miradas con él, mientras me acariciaba, la excitación fue tan brutal que tuve que morderme los labios para no gemir en voz alta.

David
hace 7 días

Una noche de fiesta en el chalet de un amigo, me estaba meando y el baño estaba ocupado, me dijo que subiera a la planta de arriba que allí había otros dos baños. Al buscar el baño, abrí una puerta y vi a dos chicas besándose. Una de ellas era la hermana de mi amigo. No me vieron, así que dejé la puerta entreabierta y me quedé quieto, mirando como un ladrón. No recuerdo cuánto tiempo pasó. Solo que me corrí con la polla en la mano, intentando no hacer ruido mientras ellas se devoraban. Desde entonces me pajeo muchas veces imaginando que estoy mirando a una pareja o a dos chicas, me he convertido en un miron

Demmdf
hace 7 días

Que golfa y que zorra eres Deva Nandiny. Muchas veces me pregunto a cuantos tíos te habrás follado

Toñi
hace 6 días

Ponerme una buena mini y unos tacones de escándalo y saber que me están mirando, que algunos vuelven la cabeza, me pone muy cachonda

PacoPaco
hace 5 días

Me encantan las zorras como tú